Madrazo, desparpajo ante los grandes
14 Marzo 2011

Las jóvenes promesas de Movistar Team siguen demostrando en la Tirreno-Adriático el enorme porvenir que se les augura. Si ayer era Andrey Amador el que estaba a punto de lograr el triunfo de etapa tras una exhibición de casi 240 km en fuga, hoy ha sido Ángel Madrazo el que ha ratificado las esperanzas que sobre él se depositaron tras convertirse en, quizás, el mejor ciclista español de su generación en categorías inferiores.

El ciclista cántabro (22 años) ha peleado de tú a tú con los mejores corredores del mundo en el selectivo final de la sexta etapa de la ronda italiana, con cuatro vueltas a un circuito en Macerata que incluía una durísima subida de dos kilómetros en la parte final. La cabeza de carrera, en la que ya sólo figuraban treinta ciclistas –entre ellos, Madrazo y Arroyo- tras las dos primeras ascensiones, se ha roto en mil pedazos en la subida definitiva tras un ataque de Cunego, que le ha dejado en cabeza junto a Evans, Nibali, Basso, Scarponi y Gilbert. El siguiente en llegar al grupo era Madrazo que, lejos de amilanarse ante semejante plantel, lanzaba un duro ataque poco antes de la banderola de último kilómetros que le mantendría en cabeza hasta ser sobrepasado a falta de 600 metros para la línea de meta.

“He pensado: ahora o nunca –explicaba Ángel minutos después de su llegada, 17º finalmente, a 16 segundos del líder, Evans- . No sé si he pecado de inexperiencia, pero era el momento para jugársela. Estos días anteriores había arrancado muy lejos porque pensaba que en un mano a mano no tenía nada que hacer con ellos. Pero mi director Jaimerena me ha mentalizado de que estaba bien y que debía esperar al final, que no me iba a dejar moverme antes. Así lo hemos hecho y ha estado a punto de salir bien. Es mi tercer año y, al igual que ayer Amador, en las dos primeras temporadas nos ha tocado estar al servicio del equipo. Estamos en uno de los mejores conjuntos del mundo y siempre hay gente para la que trabajar. Hemos cogido experiencia y ahora es el momento de empezar a demostrar nuestra calidad. Hoy me he dado cuenta de que si estoy bien, puedo jugármela ante cualquiera”.