Ningún día tranquilo en la Vuelta
11 Septiembre 2013

Vuelta a España (et. 17)

Movistar Team propicia abanicos camino de Burgos y protege a la perfección a Alejandro Valverde antes de la trilogía montañosa definitiva. Mollema (BEL) sorprende con su ataque final

Una jornada que se presumía relajada antes de la batalla final de la Vuelta a España 2013 -189 km entre Calahorra y Burgos- ha acabado deparando nervios, altas velocidades y diferencias entre algunos de los hombres de la general. El viento lateral en las llanuras de camino a la capital castellana propició la aparición en cabeza de un Movistar Team que a falta de 30 kilómetros para meta rompió en tres grupos un pelotón en cuyo primer escalón se situaron Moreno, Herrada, Erviti, Gutiérrez y un Alejandro Valverde siempre atento en posiciones cabeceras. La insistencia de Iván e Imanol contribuyó a que los descolgados -entre los que se encontraban Pozzovivo (ALM), 5º en la general, y Pinot (FDJ), 7º- terminaran perdiendo un minuto y medio en meta.

Por delante, Mollema (BEL) daba la sorpresa al atacar a falta de 800 metros y tomar una ventaja que los sprinters no pudieron cerrar. Herrada (9º) era por tercer día consecutivo el mejor de una escuadra telefónica que se volcará con Valverde -3º, a 1’14» de Nibali (AST)- en las tres últimas etapas de montaña. La primera, mañana jueves con la exigente subida a Peña Cabarga (1ª; 6 km al 9’2%) tras 187 km con otros cuatro puertos puntuables en una jornada que partirá de Burgos.

DECLARACIONES / Alejandro Valverde: «Hoy parecía la etapa más tranquila, pero está claro que esta es una Vuelta para estar atentos todos los días y de principio a fin de la etapa. Sabíamos que podía ser una jornada peligrosa por el viento, porque aunque pegaba de cara casi todo el recorrido, al final había zonas en la que iba a cambiar. Teníamos que estar atentos, colocados delante al final y es lo que hemos hecho. La propia velocidad es la que hacía que el grupo se cortara y por eso pasábamos delante con, sobre todo, los Saxo. Ha sido ir a tope hasta meta y gracias al equipo que me ha arropado mucho delante hemos salvado el día y hay que estar contentos. El día de descanso ha venido muy bien, aunque al inicio siempre notas las piernas un poco raras. Mañana empieza lo decisivo, con un final que no he subido nunca. Aunque conocía la mayoría de la Vuelta, había sitios que no y uno era Peña Cabarga. Después del Tour preferí descansar que reconocer esos sitios, porque si uno está bien de forma, no hay tanto problema«.