Volta a Catalunya (et. 5)
El murciano, brillantísimo en Valls para sumar su segundo triunfo parcial en la Volta a Catalunya tras una labor magnífica de la escuadra telefónica en los abanicos
Con el dolor en el corazón de la dura caída de Pablo Lastras y sus lesiones ayer en la etapa reina de la Volta a Catalunya, Alejandro Valverde y Movistar Team salieron a la quinta etapa de la carrera -195 km entre Alp y Valls, patria de Xavi Tondo- a brindarle un triunfo. Y a fe de que lo consiguieron. El murciano regaló otra lección de ciclismo en esta temporada 2015 al mostrarse como el más fuerte en un final donde los hombres dirigidos por José Luis Arrieta y José Luis Laguía fueron los artífices de un nuevo vuelco a la ronda catalana.
Un abanico provocado por varios hombres de la escuadra telefónica junto al Team Sky redujo el pelotón principal a una veintena de unidades entre las que no figuraban ni Dan Martin (GRS) ni el líder, Bart De Clercq (LTS). El empuje de los Herrada o Anacona fue secundado después por un gran Rubén Fernández, quien junto al resto de escapados abrió unas diferencias que superaron el minuto en la base del Alt de Lilla (2ª), dificultad final de la jornada. Allí, descolgado el joven murciano, Alejandro Valverde lanzó un duro ataque que sólo pudieron seguir ocho ciclistas, a los que siguió tensando en el descenso.
A falta de 3 kilómetros, la falta de colaboración y un corte en los relevos permitieron a Valverde buscar su ofensiva final y entrar brazos en alto en solitario -86ª victoria profesional, tercera del año, 12ª de Movistar Team en 2015- con 5" sobre el grupo perseguidor. El murciano ya es 4º de la general, a 16" del nuevo líder Richie Porte (SKY), en una carrera a la que le restan sólo el hipotético sprint de Port Aventura (sábado) y las ocho vueltas a Montjuïc del domingo, pero donde cualquier sprint, corte o imponderable pueden aún resultar claves.
DECLARACIONES / Alejandro Valverde: “Ha sido un día muy bonito para nosotros. Sabíamos que hacía bastante viento en la parte final, íbamos todo el equipo muy atentos y siempre adelante y hemos decidido acelerar. Hemos conseguido provocar el abanico y dejado atrás a De Clercq y Martin; además nos hemos organizado bastante bien en la escapada, ya que nos interesaba a todos, y tiramos a tope. Una vez Rubén se ha apartado, he visto que empezaba a llevar todo el peso de la carrera desde el último kilómetro de la ascensión, así que he arrancado para intentar seleccionar el grupo. En el descenso tampoco me pasaban a relevo, he visto que había un corte, me he lanzado y he conseguido irme y lograr cinco segundos más.
Es cierto que estando a 16”, ese tiempo que perdimos el día es una pena. Además, la caída condicionó un poco todo: el golpe realmente no fue nada, pero cuando tienes una caida siempre te levantas dolorido al día siguiente, y todo el esfuerzo que pasamos y la sensación de congelación en la bajada de la Creueta ayer también me impidieron llegar bien a La Molina. De todas formas, creo que estoy haciendo una gran Vuelta, yo y el equipo en general, y estamos muy contentos. Vamos a ver qué pasa de aquí al domingo en Montjuïc. Por nuestra parte ya hemos cumplido muy bien y pelearemos por lo que venga. Todo está muy apretado, las fuerzas están muy parejas e incluso las bonificaciones pueden marcar la carrera.
Siempre que venimos a la Volta nos acordamos muchísimo de Xavi; realmente lo hacemos en todo momento, y cualquier victoria que consigue este equipo, aunque no lo digamos, es por él. Hoy también nos acordamos especialmente de Pablo tras su caída de ayer. Que sepa que todo el equipo está con él, que todos seguimos fuertes para hacerle feliz y que esta victoria también va por él”.